El diciembre pasado tuve la oportunidad de pasar por Madrid y visitar la exposición de Delacroix que se exponía en el Caixaforum de esta ciudad. Nada más entrar observé que realizaban visitas de dicha exposición y pensé en participar en ellas sin pensarlo dos veces: he de confesar que siempre que puedo elijo la visita guiada, debe ser “deformación profesional” 🙂
La visita guiada estaba organizada de la siguiente forma: En el lateral del mostrador principal te podías apuntar a la visita, pero la lista de inscritos se abría media hora antes de la visita. Además las plazas estaban limitadas a 30 personas creo recordar. ¿Qué pasó? Pues que una hora antes ya estábamos haciendo la cola para inscribirnos y no era yo la primera!!! Además la gente cuando se iba a apuntar contaba las personas que había en la cola y si superaban los 30 se olvidaba de inscribirse, pues sabía que no tendría plaza. Hubo gente que se quejó diciendo que la cola debía comenzar a formarse media hora antes de la visita y no una hora, pero aquí he de admitir que, en mi opinión, quien de verdad está interesado en la visita se preocupa por mirar si ya hay gente interesada o no. read more